Si tiene un bulto molesto, y a veces doloroso, en la muñeca, lo más probable es que se trate de un quiste ganglionar. Estos quistes suelen ser inofensivos y la mayoría desaparecen sin tratamiento. Sin embargo, si un quiste ganglionar en la mano o el pie le causa dolor y limita su movilidad, consulte al Dr. Leon Reyfman sobre las opciones de tratamiento para deshacerse de este antiestético bulto lleno de líquido. Le explicará qué son los quistes ganglionares, cuáles son sus causas y le recomendará un tratamiento y cuidados en función de cómo estén afectando a su calidad de vida.
¿Qué es un quiste ganglionar?
Un quiste ganglionar es un bulto lleno de líquido que aparece justo debajo de la superficie de la piel, en las articulaciones y tendones o cerca de ellos. Este tipo de quiste puede desarrollarse cuando se produce un desgarro en el tejido que recubre un tendón o una articulación. Esto hace que el tejido se abombe y cree un saco. Otro nombre que recibe un quiste ganglionar es quiste de la biblia.El quiste puede tener el tamaño y la forma de un guisante, pero a veces puede agrandarse con el tiempo. Estos quistes no provocan ningún síntoma y pueden desaparecer por sí solos.
Los quistes ganglionares suelen desarrollarse en el:
- Muñeca - Por delante o por detrás
- Dedo: cerca de cualquier articulación del dedo, cerca de la palma o justo debajo de la uña.
- Pie - Cerca del tobillo o cerca de los dedos
Algunos quistes ganglionares son tan pequeños que es posible que no se vea un bulto evidente bajo la piel, pero siguen causando dolor. Se conocen como gangliones ocultos, y se necesita una ecografía o una resonancia magnética para revelarlos.
¿Cuáles son las causas de los quistes ganglionares?
Los médicos no están seguros de la causa exacta de los quistes ganglionares. Se cree que se desarrollan tras una lesión o traumatismo menor en una articulación o tendón. A medida que el tejido articular se rompe, se abomba y forma un pequeño quiste o saco que crea una masa mayor. El líquido de la articulación se filtra en el saco y causa hinchazón.
Un defecto en la cápsula articular o en la vaina del tendón, capas de tejido conjuntivo que permiten a los tendones moverse suavemente sobre los huesos, puede hacer que los tejidos articulares se abulten. Los quistes ganglionares son frecuentes en niños y adultos.
Síntomas de los quistes ganglionares
La mayoría de los quistes ganglionares aparecen como un bulto o masa blanda bajo la piel que cambia de forma y tamaño pero no se mueve. Suelen ser indoloros, pero la inflamación puede aparecer con el tiempo o de repente.
Otros síntomas incluyen:
- Un quiste grande o muchos más pequeños
- Cierto grado de dolor, especialmente después de una lesión o traumatismo por movimientos repetidos.
- Dolor duradero que empeora al mover la articulación afectada.
- Presión sobre los nervios que provoca hormigueo o entumecimiento
- Debilidad en el dedo afectado si el quiste está conectado a un tendón.
- Un bulto que a menudo desaparece y vuelve a aparecer
La forma en que el quiste afecte a su vida depende de su localización y tamaño, así como de cómo crezca con el tiempo. Suelen aparecer en la parte superior o inferior de la muñeca, pero también pueden aparecer en pies, rodillas y tobillos. Aunque algunas personas no sienten nada, otras pueden sentir irritación, dolor u hormigueo si los quistes aumentan de tamaño o presionan nervios, ligamentos o arterias.
¿Cómo saber si un bulto es un quiste ganglionar?
Un quiste ganglionar suele tener el aspecto de un bulto o protuberancia en la muñeca, el dedo o el pie, de entre 1/3 y 1 pulgada de diámetro. Es estacionario y puede aparecer de forma repentina o gradual. El bulto será redondo o deforme, más parecido a un óvalo. A menudo cambia de tamaño e incluso desaparece.
Un quiste ganglionar se sitúa justo debajo de la superficie de la piel. Puede tener el aspecto de una burbuja soplada de una articulación. A veces, los ganglios tienen un efecto translúcido. Se puede ver a través del bulto en ciertos ángulos.
¿Los quistes ganglionares son benignos o malignos?
Aunque aparecen como bolas de líquido o bultos que crecen en la membrana que recubre tendones y articulaciones, los quistes ganglionares no son malignos ni cancerosos. Suelen ser inofensivos y crecen en el dorso de manos y muñecas, pero a veces se desarrollan en pies, rodillas y tobillos.
Al igual que los tumores benignos, los quistes ganglionares son asintomáticos, pero algunas personas experimentan dolor, sensibilidad, disminución del tono muscular, etc. A diferencia de los tumores benignos, los quistes no pueden convertirse en tumores malignos.
¿Cómo diagnosticar un quiste ganglionar?
Los quistes ganglionares son muy fáciles de diagnosticar. Su aspecto y localización, en la muñeca o los dedos, son signos reveladores de la presencia de ganglios. El médico especialista en dolor realizará una exploración física de la zona o parte del cuerpo afectada, como la mano o el pie. Puede presionar la protuberancia para comprobarla o iluminarla con una luz para ver si es translúcida y detectar anomalías. Si la luz atraviesa el bulto, es mucho más probable que contenga líquido y se trate de un quiste.
Además, la ecografía o la resonancia magnética también pueden utilizarse para diagnosticar un quiste y distinguirlo de una malformación vascular. A veces, los médicos recomiendan una radiografía para buscar una artritis articular subyacente cerca del quiste.
En algunos casos, el médico puede extraer algo de líquido del interior del bulto para su posterior análisis en un proceso denominado biopsia.
Tratamiento del quiste ganglionar
Los quistes ganglionares no requieren tratamiento a menos que estén causados por una lesión o se vuelvan dolorosos. Acude a tu médico para que te examine y se asegure de que no se trata de nada grave.
Una vez identificado y diagnosticado el quiste ganglionar, el médico puede aconsejarle que lo observe o vigile. Muchos quistes suelen desaparecer con el tiempo. Además, la inactividad o el reposo de la muñeca o el pie pueden reducir la inflamación y aliviar el dolor.
Los tratamientos del quiste ganglionar incluyen:
- Medicamentos antiinflamatorios: los medicamentos pueden reducir la hinchazón y aliviar las molestias leves.
- Férulas o corsés: ofrecen sujeción e impiden mover la zona afectada, lo que reduce la inflamación y el dolor, y el ganglión puede reducirse y desaparecer por sí solo.
- Aspiración o drenaje: el médico utilizará una aguja para drenar el líquido de los quistes. Se sentirá mejor de inmediato. Sin embargo, como la cavidad del quiste permanece bajo la piel, lo más probable es que vuelva a llenarse de líquido al cabo de un tiempo.
No intente tratar los quistes ganglionares en casa golpeando el quiste con un libro o un objeto pesado. Puede acabar rompiéndose un hueso o lesionándose de alguna otra forma, y el ganglión reaparecerá de todos modos. Tampoco pinches el quiste con un alfiler u otro objeto punzante. Podrías provocar una infección y otras complicaciones.
¿Cuándo hay que operar un quiste ganglionar?
El médico puede recomendar la intervención quirúrgica si el quiste ganglionar se vuelve doloroso, otros tratamientos no proporcionan alivio o el quiste sigue reapareciendo. El cirujano extraerá el quiste y eliminará la zona que lo rodea, así como una estructura en forma de tallo o raíz, que lo une a la articulación.
La cirugía de extirpación de un quiste ganglionar se denomina ganglionectomía. Suele ser una intervención ambulatoria. Puede volver a casa el mismo día. La recuperación completa puede llevar de dos a seis semanas. La extracción de un quiste de la parte inferior de la muñeca es un procedimiento más complejo debido a la proximidad de la arteria radial.
La extirpación quirúrgica del quiste ganglionar resuelve eficazmente todos los síntomas. En algunos casos, los ganglios pueden reaparecer.
¿Qué ocurre si no se trata un quiste ganglionar?
Si un quiste ganglionar no molesta, es posible que no necesite tratamiento. La mayoría de los quistes desaparecen por sí solos. Es posible que su médico le diga que lo vigile para detectar cualquier cambio.
Es posible que necesite tratamiento en caso
- Un quiste presiona un nervio o un tejido articular y causa dolor
- Ciertos movimientos o tareas se vuelven difíciles, como agarrar un lápiz o caminar.
- Se siente acomplejado por su aspecto
Un quiste ganglionar puede no requerir tratamiento si no presenta síntomas molestos.
¿Está usted interesado en saber más acerca de los quistes ganglionares y sus opciones de tratamiento - Llame a Pain Management NYC hoy y programe una cita con el Dr. Leon Reyfman para opciones eficaces para tratar los quistes ganglionares. El Dr. Reyfman entiende lo alarmante que puede ser un bulto o masa sospechosa en la mano o los pies y examina el quiste cuidadosamente para hacer un diagnóstico preciso basado en sus síntomas. Él viene con planes de tratamiento personalizados que se centran en la prestación de atención de la más alta calidad para sus necesidades individuales y le ayuda a tomar decisiones informadas con respecto a su bienestar.
Boleslav Kosharskyy, MD, es uno de los mejores médicos de su clase en tratamiento intervencionista del dolor. Está certificado en anestesiología, medicina intervencionista del dolor y cuidados paliativos.
El Dr. Kosharskyy es Profesor Asociado de Anestesiología y Medicina de Rehabilitación en el Albert Einstein Medical College. También es Director Médico Adjunto de Medicina del Dolor y Director de Anestesia del Centro de Sustitución Articular del Centro Médico Montefiore y del Albert Einstein Medical College.
Es miembro activo de la Sociedad Americana de Anestesiología (ASA), la Sociedad Americana de Anestesia Regional y Medicina del Dolor (ASRA) y la Sociedad de Anestesiólogos del Estado de Nueva York (NYSSA).