El equipo de expertos de Pain Management NYC trabaja para aliviarle los espasmos musculares del cuello desarrollando el mejor plan de tratamiento. El objetivo, como siempre, es conseguir que vuelva a su estilo de vida activo y evitar futuros dolores lo antes posible. Mediante un seguimiento cuidadoso, pruebas exhaustivas y un examen minucioso, los mejores especialistas en dolor muscular de NYC identifican el origen de sus molestias y diseñan un plan de tratamiento adaptado a sus necesidades específicas.
Tu cuello tiene un trabajo importante. Es responsable de sostener una forma del tamaño de una bola de bolos en la parte superior de un tallo delgado. Debido a su precario diseño, es fácil lesionarse el cuello. Puede sufrir dolores y espasmos musculares debidos al desgaste o a un accidente. Además, una mala postura, un estilo de vida sedentario y mirar constantemente los dispositivos electrónicos son factores que pueden provocar molestias y espasmos musculares en el cuello.
En ocasiones, los espasmos musculares y el dolor de cuello pueden ser indicios de problemas más graves. Si el dolor aparece de repente y es agudo y se dispara hacia el hombro, tiene un problema que merece la pena que vaya al médico. Si el dolor va acompañado de entumecimiento y debilidad intensa, busque asistencia médica lo antes posible en la mejor clínica del dolor de Manhattan para evitar daños permanentes en los nervios y otros órganos.
Causas de los espasmos musculares cervicales
La biomecánica de un objeto pesado -es decir, la cabeza- que descansa sobre un objeto flexible como el cuello es incómoda y precaria. Muchas lesiones y afecciones diferentes pueden provocar dolor, entumecimiento y debilidad en el cuello. Entonces, necesitarás un tratamiento para los espasmos musculares del cuello. Algunas de las afecciones que provocan espasmos musculares en el cuello son:
- Lesiones. Los accidentes de tráfico, sobre todo los de tráfico por alcance, son una de las principales causas de dolor y espasmos musculares en el cuello. Cada vez que el cuello o la cabeza sufren una sacudida brusca hacia delante o hacia atrás, el tejido blando puede resultar dañado y provocar dolor miofascial en el cuello.
- Enfermedades. Si le han diagnosticado meningitis, cáncer o artritis reumatoide, es posible que los espasmos musculares del cuello vayan en aumento.
- Artrosis. Con la edad, las articulaciones se desgastan. El deterioro del cartílago de las vértebras puede provocar roces hueso con hueso, inflamación, rechinamiento y crujidos en el cuello.
- Esguince o distensión muscular. Los movimientos repetitivos -como usar el teléfono, rechinar los dientes, leer en la cama o mirar fijamente la pantalla del ordenador- pueden tensar los músculos delicados.
- Compresión de nervios. Los daños en el cuello pueden provocar una hernia o fuga del disco gelatinoso que se encuentra entre dos vértebras. Al desinflarse este cojín, los nervios situados dentro de la columna vertebral pueden comprimirse y provocar espasmos musculares en el cuello.
- Degeneración discal. La degeneración discal, una causa frecuente de espasmos musculares en el cuello de las personas mayores y una de las principales causas de dolor de cuello, se produce tras años de desgaste de los tejidos del cuello.

Síntomas de los espasmos musculares en el cuello
Los síntomas de los espasmos musculares en el cuello son reconocibles para la mayoría de las personas debido a la gran carga de trabajo que soporta el cuello cada día. Aún así, los síntomas más comunes son:
- Dolores de cabeza por tensión crónica
- Menor flexibilidad
- Dolor, especialmente cuando se mantiene la cabeza en una misma posición durante un largo periodo de tiempo.
- Tensión
- Twitching
Aunque la mayoría de los espasmos musculares del cuello se calman con tratamiento casero de reposo, hielo y analgésicos de venta libre, consulte a su médico en el Pain Management Center New York si su dolor:
- Sensación grave y repentina
- Se extiende a brazos y piernas
- se acompaña de entumecimiento, debilidad o dolor de cabeza intenso
- Continúa durante varios días sin alivio perceptible
Diagnóstico de los espasmos musculares cervicales
Al igual que con la mayoría de las afecciones dolorosas, comente sus antecedentes médicos y familiares completos con su médico especialista en el tratamiento del dolor de Nueva York. Le examinará para determinar la debilidad, la sensibilidad y la fuerza del cuello. También observa la flexibilidad de su cuello durante o después de los espasmos musculares.
Aunque los espasmos musculares del cuello suelen diagnosticarse sólo con una exploración física, el médico puede solicitar pruebas adicionales como radiografías, tomografías computarizadas, resonancias magnéticas o análisis de sangre para descartar posibles infecciones. Pruebas nerviosas como una electromiografía revelan si hay algún daño nervioso.
Tratamiento de los espasmos musculares en el cuello
Una vez que el médico descarta cualquier complicación grave, la mayoría de los espasmos musculares del cuello responden bien a los tratamientos caseros en unas pocas semanas. Las compresas frías y calientes, los estiramientos suaves y el reposo ayudan a relajar y curar los músculos del cuello. Si el tratamiento en casa no tiene éxito, sin embargo, su médico de manejo del dolor en Manhattan tiene muchas otras opciones de tratamiento disponibles, incluyendo:
- Fisioterapia, para fortalecer los músculos del cuello, recuperar la flexibilidad y aliviar las molestias.
- Medicamentos con receta, como relajantes musculares, anticonvulsivos, antidepresivos tricíclicos y narcóticos de corta duración.
- Unidades especializadas de estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS), que envían pequeñas señales eléctricas a los tejidos sensibles para interrumpir el dolor y detener los espasmos.
- Tracción cuidadosa y supervisada, utilizando pesas, una vejiga de aire o un sistema de poleas para estirar y sostener suavemente los músculos del cuello que puedan haberse pinzado.
- Collarines o collarines cervicales, que proporcionan apoyo aliviando la presión del peso de la cabeza sobre los músculos del cuello, dándoles tiempo para recuperarse.
- Inyecciones de analgésicos y esteroides para aliviar el dolor y reducir la inflamación.
- Cirugía mínimamente invasiva, para aliviar la compresión de la médula espinal o el dolor de la raíz nerviosa - realizada sólo después de que todas las demás medidas hayan fracasado en reducir sustancialmente sus molestias.
El mejor tratamiento para el dolor miofascial de cuello y los espasmos musculares del cuello incluye consejos para evitar más molestias o daños. Algunas de las mejores formas de evitar el tratamiento de los espasmos musculares del cuello es ajustar su entorno para minimizar el dolor futuro. Algunas sugerencias incluyen:
- Evitar llevar bolsas pesadas con correas finas
- Sostener el teléfono correctamente, sin meterlo debajo de la barbilla.
- Utilizar técnicas posturales adecuadas, incluida la colocación ergonómica del ordenador, el escritorio y la silla.
- Hacer pausas frecuentes
- Evitar fumar
- Dormir bien en posturas sanas y sin estrés
La prevención es el mejor remedio, pero si ya tiene espasmos musculares en el cuello, póngase en contacto con Pain Management NYC para recibir la mejor atención, que incluye un diagnóstico preciso y la forma más adecuada de tratamiento.

Leon Reyfman, MD, es uno de los mejores médicos de su clase en el tratamiento intervencionista del dolor. Es un especialista en el alivio del dolor reconocido a nivel nacional y se encuentra entre los mejores médicos de atención del dolor en la ciudad de Nueva York y el país. Es un experto galardonado y colaborador de destacados medios de comunicación.
El Dr. Leon Reyfman ha sido reconocido por su enfoque reflexivo, minucioso y moderno para tratar el dolor crónico. Ha sido nombrado uno de los "mejores médicos para el tratamiento del dolor de Nueva York" y uno de los "mejores médicos de Estados Unidos" en tratamientos avanzados de lesiones deportivas. Entre otros reconocimientos, fue votado por sus colegas como "Castle Connolly Top Doctors™" y "New York Super Doctors™". El Dr. Leon Reyfman formó parte del equipo médico en los Juegos Olímpicos de Verano de 2016 en Río de Janeiro, Brasil.